Lo Perfecto Muchas Veces Es Enemigo Del Exito

Publicado el 29 de octubre, 2016
Nunca he visto mayor sufrimiento, dolor y angustia en aquellos seres que en la búsqueda de la perfección, pierden la óptica de la excelencia; y se aproximan continuamente al sufrimiento, al stress, al temor, a ese pánico que genera un descontrol de las emociones, de los eventos y por tanto que nos lleva al error mismo. Nos damos cuenta como por tratar de hacerlo tan “impecablemente perfecto¨ perdemos la fluidez. De hecho, me parece que la perfección dista del talento nato con que las personas ejecutan una labor de manera fluida, espontanea, pacífica y natural. Estoy cansado de verlos a través de los famosos programas televisivos llamados “realities”, como la búsqueda de la perfección descalifica personas con un alto potencial de éxito. Algo perfectamente explicable! La búsqueda obstinada de la perfección es enemigo del éxito! No quiero que se mal interprete esta opinión. Creo que siempre debemos propugnar por la búsqueda incesante de la mejora continua, pero no es lo mismo eso, que la psicorigidez a la que se someten muchas personas por obstinadamente intentar hacerlo todo de manera PERFECTA y perder la oportunidad de lograr el mejor resultado!

 

No hay nada que muchas veces nos aleje más del éxito o de las metas anheladas que el tratar esforzarnos en hacer “perfectamente el trabajo perfecto”. En estos tiempos en que nuestra realidad de vida o de trabajo nos desafía a romper cada día con el patrón recurrente o habitual de conducta, que nos desafía a estar abiertos a las cosas nuevas que nos trae la vida, resulta particularmente importante perder el miedo a equivocarse.

 

Recuerdo haber visto en una ocasión un letrero que me llegó vía internet una foto en un mural que leía: “EQUICOVARSE ES DE HUMANO, OCULTAR LOS ERRORES UNA ESTUPIDEZ, NO APRENDER DE ELLOS ES IMPERDONABLE”. Nada es más cierto en este nuevo espacio laboral y organizacional en el que estamos trabajando para posibilitar el desarrollo del talento humano propio y del otro. Sin dudas que hay que dar oportunidad equivocarnos, tenemos que dar lugar que las personas que están a nuestro alrededor se sientan tentados a asumir riesgos; y que la intención genuina siempre sea para para hacer cada vez mejor su trabajo………..pero para ello se debe perder el miedo a equivocarse. Debemos aprender a disfrutar del momento que da ese espacio de cuando nos damos cuenta sin temor a justificar nuestras limitaciones cuando nos equivocamos. Hay una expresión que utilizo mucho y que tome de mis colegas facilitadores venezolanos de ODinamica, quienes a través de sus intervenciones de facilitación siempre enfatizan que si “justificas tus limitaciones, vivirás con ellas por siempre”. De todo lo anterior, lo más importante es aprender de esto!

 

Hoy día todavía me sorprende ver personas en las organizaciones con patrones de pensamientos trasnochados en que para ellos el error no es una posibilidad. Me parece que son patrones de pensamientos completamente ortodoxos y obsoletos en la que la nueva cultura organizacional no da la posibilidad”! El talento hoy día exige creatividad, innovación, nuevas formas de hacer las cosas. Exige que el talento y las ideas de las personas fluyan plenamente sin temor alguno a equivocarse. En este nuevo contexto debemos ser tolerantes ante la posibilidad de que el empleado al arriesgarse a desarrollar una idea o un trabajo, se corra el riesgo a equivocarse o errar. Sé que en los procesos donde se aplica los principios de Calidad Total hablamos de alcanzar cero errores, sobre todo cuando estamos trabajando con estandarización de procesos o en la ejecución de procesos industrializados. Sin embargo, hoy día nada resulta más nocivo para la innovación en este nuevo contexto laboral porque con ello coarta el flujo de buenas ideas, así como el replanteamiento del status quo. Hoy día no hay una mayor sanción para una persona talentosa que el hecho de que ellos quieran apoderarse de su trabajo, generar nuevas ideas y se le atemorice con las consecuencias al riesgo de equivocarse; lo más difícil hoy es saber o tratar de entender que todavía hay ejecutivos que se mantienen en esa tónica!

 

El ambiente de trabajo, hoy día exige que nuestra gente tenga el espacio para pensar, cuestionar, desafiar, replantear, dudar, intentar, equivocarse en el intento, pero lo más importante que debemos procura es que desarrolle la capacidad reflexiva de aprender de esa experiencia y aplique la reflexión activa para aplicar de inmediato lo aprendido. Si esto ocurre, el error se habrá pagado muchas veces.

 

El éxito en el camino lo encontramos no porque por el temor a que nos equivoquemos permanezcamos estáticos y cómodos en una posición firme, invariable, que no nos mueve o aproxima a nuestra meta, sino porque intentemos insistentemente por varios caminos en la búsqueda de nuestro propio éxito, aprendiendo de esos momentos difíciles, pero más aun disfrutando lo fuerte que nos hace el saber levantarnos cada vez que en el intento no caemos.

 

Una de las grandes cualidades que hace exitoso al ser humano es equivocarse lo necesario para aprender y ser fuerte; y posteriormente intentar todo para aplicar lo aprendido. A esto se le llama CRECIMIENTO. Es en este contexto es que decimos que la búsqueda de la perfección en muchas ocasiones es enemigo del éxito!